Hay muchos artículos interesantes que tratan de dar consejos para que los niños y niñas odien la lectura. Uno de ellos es "Nuevas maneras de enseñar a los niños a odiar la literatura", de Gianni Rodari (CLIJ, nº 187, Noviembre 2005). En su Proyecto de Animación a la Lectura, el Colegio Juan de Vallejo recoge un resumen de este artículo. Por otra parte, en una sección del Servicio de Orientación a la Lectura (SOL), Kepa Osoro escribe "Cómo enseñar a los niños a odiar la lectura". Igualmente, el Laboratorio de Lectura de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, publica "Tips para conseguir que los niños odien la Lectura". Y en su "Guía práctica para hacer hijos lectores", de Joan Carles Girbés, la Generalitat de Cataluña se hace eco de consejos, estrategias y actuaciones para fomentar la lectura, de donde se puede extraer "Diez consejos infalibles para que los niños odien los libros". Sin olvidar, de Daniel Pennac, "Los diez Derechos del Lector", en su excelente libro "Como una novela", imprescindible para quienes se interesen por este tema.
Me gustaría extraer de estas fuentes citadas un breve resumen. Para padres/madres y maestros/as.
1. Cuando empiecen a leer en voz alta, interrúmpelos constantemente para marcarles sus errores.
2. Exígeles que lean los libros que a tí te gustaron, de principio a fin, aunque no les atraiga la historia.
3. Menosprecia sus gustos y no respetes su criterio.
4. Oblígales a leer, como si tuvieran que comerse ese plato de lentejas que tanto odian, frío.
5. Convierte los libros en "tareas" escolares: mándales resumenes, fichas, actividades... interrógales e intenta controlar si han leído un libro que quizás tú no hayas leído.
6. Échales a menudo en cara que no les gusta leer.
7. Confronta la lectura con otras actividades, por ejemplo: "si no lees, no verás tu programa de televisión favorito, o no jugarás en el ordenador".
8. Sermonéales con tu aburrido discurso sobre los beneficios de la lectura.
9. Convierte la lectura en algo utilitario, en una herramienta académica solamente.
10. Niégate a leerles cuentos, a contarles historias, a jugar con el lenguaje, a disfrutar con ellos los momentos de lectura.
LOS DIEZ DERECHOS DEL LECTOR (Daniel Pennac)
Como padre agobiado ante el hecho de que su peque no lee ni con dos cañones recortados sobre la nuca, no te puedes imaginar, Isabel, cuán reconfortante me ha resultado la lectura de tu reseña: me he visto reconocido, para mi vergüenza, en la práctica totalidad de los puntos del decálogo, y hago, desde ya, firme propósito de no volver a incurrir en tamaños dislates. Y a esperar acontecimientos. Felicidades, en todo caso, por tu blog, que procuraré seguir en la medida en que pueda a partir de ahora.
ResponderEliminarUn abrazo y buena semana.
Me encanta esta entrada.
ResponderEliminarHola.
Saludos desde el papel que cuelga de la espiral de hierro.
Me dedico a llenar páginas de cuadernos con mis sueños desde mi siempre, liberando los personajes que habitan bolígrafos y lápices un día y otro también.
Si quieres entender de que hablo, visita:
http://espiralesdetinta.blogspot.com/
Me encantará recibirte, pongo la cafetera al fuego a la espera de tu visita.
Hola. Llego aquí a través de Darabuc. Enhorabuena por el trabajo.
ResponderEliminarAbrazos de letras,
Javier.
Hola,Manuel:
ResponderEliminarMe ha gustado leer tu comentario: desprende humor e ironía. Adivino, por tu manera de encarar el "asunto", que conseguirás enganchar a tu "peque" en la lectura. Seguro. ¡Ánimo!
Hola, Fernando:
ResponderEliminarGracias por el café, por tus palabras y por el regalo que ha supuesto para mí encontrarte. Tu trabajo me parece extraordinario.Enhorabuena. No dudes que lo seguiré a partir de ahora. He enlazado tu página en la mía.
Ah...El próximo café, con hielo...
Hola, Javier:
ResponderEliminarMil gracias por tu comentario y por visitarme. Te felicito por tu trabajo con abrazos de LETRAS MAYÚSCULAS...